Cuando se habla de la izquierda en Argentina se tiende a pensar exclusivamente en el peronismo y su expresión kirchnerista, esto debido a su hegemonía de casi 20 años. Sin embargo, existe otra que es digna de mención tanto por su historia como por la oleada de triunfos que lleva en este 2023: la Unión Cívica Radical (UCR).

La UCR es un partido que tiene 132 años y que ha pasado por diferentes etapas, pero que en este momento se define como un partido socialdemócrata y es parte de la Conferencia Permanente de Partido Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL, organización que aglutina al mayor número de partidos de izquierda en la región) y de la Internacional Socialista (IS, organización que reúne a la mayoría de los partidos socialdemócratas del mundo). Estos son dos elementos, su ideología y membresías, que lo unen al PRI.

La UCR le ha dado a Argentina dos de sus presidentes históricos, Yrigoyen y Alfonsín, pero también a uno desastroso, De la Rúa. Esto ha dotado de experiencia al partido, lo cual, con el paso de los años, le permitió reconstruirse y ser parte fundamental de Juntos por el Cambio (JxC, antes Cambiemos), una coalición que en 2015 sacó del poder al peronismo y que en 2023 ha ganado la mayoría de las elecciones provinciales.

En JxC han sobresalido otros partidos de derecha y sus líderes, como Mauricio Macri, pero ha sido con el paso del tiempo que la UCR demostró su verdadero peso al interior de la coalición: de los seis triunfos provinciales que JxC ha tenido en este año, tres han llevado como candidato a un cuadro de la UCR, siendo el partido más exitoso de la coalición.

Antes de estos triunfos, los precandidatos presidenciales derechistas dentro de JxC reconocieron el papel de la UCR y eligieron compañeros de fórmula (vicepresidente) a políticos de la UCR. Después vinieron las turbulentas primarias y el inicio de las campañas presidenciales, lo cual trajo la sorpresa del fenómeno Milei, afectando a JxC, la cual se ha hundido al tercer lugar. En este mal momento y condición de vulnerabilidad es cuando la UCR ha sacado la cara por JxC y ha ganado en provincias consideradas bastiones del peronismo-kirchnerismo, encaminando a JxC a conseguir algo inédito: tener más gobernaturas en un ciclo electoral que el peronismo.

Si se diera alguna sorpresa y JxC ganara la Presidencia, un escenario poco probable, la UCR aseguraría su lugar en la Vicepresidencia. Pero, si la coalición es derrotada, la UCR mantendrá un peso importantísimo al interior de la coalición con tantos gobiernos estatales, así como los éxitos que seguramente tendrá en las elecciones de diputados, senadores y demás cargos locales.

La UCR tiene un futuro prometedor por delante, ha sido semillero de buenos cuadros políticos, es el ala socialdemócrata de JxC y no cargará con el peso de la derrota presidencial. Además, si gana Milei, podrá levantar la mano como principal voz opositora dado el elevado desprestigio con el que terminará el peronismo. Pase lo que pase en la elección presidencial, la UCR ya ganó.

Secretaría de Asuntos Internacionales

CEN del PRI